La noticia de mi última hazaña estaba en boca de todo el mundo y era cuestión de tiempo que alguien se pasase de listo, o como en este caso, de gracioso, con tan mala suerte de que yo estaba allí para escucharlo. Puedo soportar que la gente me tema, incluso que critiquen mi obra, pero no aguanto las burlas ni los menosprecios, y en este caso tuve una buena ración de ambas.
Un hombre que estaba sentado en la mesa más cercana a la entrada del bar leía la noticia de mi último asesinato a sus 2 amigos, que estaban sentados junto a él. Al acabar de leer la noticia dijo entre risas que si él era la próxima víctima, aconsejaba al asesino que le cortase la polla y se la trasplantase, y sus dos amigos, junto con la mitad del bar, estallaron a carcajadas. Habría sacado la pistola en ese momento y me habría cargado a cada uno de esos cerdos, pero sería demasiado fácil y apenas sufrirían, yo valía para mucho más que para liarme a tiros con un bar lleno de borrachos. Ya les llegaría su hora a cada uno de ellos, pero por el momento mi atención se centró en el gracioso.
Le esperé durante más de una hora y media fuera del bar, ocultándome tras unos contenedores de basura. Cuando se despidió de sus dos amigos se fué andando calle arriba. No fué difícil seguirle sin que se diese cuenta de mi existencia, pues la borrachera que llevaba era bastante considerable. Cuando por fín llegó a su portal y logró sacar las llaves de su bolsillo llegó el momento de actuar. Le ataqué por la espalda y en menos de 2 minutos le tenía tumbado y amordazado en el cuarto de las basuras, donde nadie podría vernos a esas horas.
"La polla no me la guardaré como trofeo ni me la trasplantaré, pero tranquilo, te prometo que antes de que te mueras la tendrás sobre tu cabeza", le dije. Ya no le hacía tanta gracia, y menos gracia le haría en 1 un minuto. Cumplí mi promesa, y por un momento pensé en hacer una foto con mi móvil al gracioso con su nuevo sombrero y enseñársela, a ver si le hacía tanta gracia como a mí, pero estaba a punto de desmayarse y tendría que darme prisa si quería llevarme mi trofeo y que él lo viese, no había tiempo para fotos. En este caso me llevé sus orejas, parece que tampoco le hizo mucha gracia, y pese a estar amordazado estaba haciendo bastante ruido. En este caso no opté por rajarle la garganta para acabar con su agonía, sino que le apreté el cuello con todas mis fuerzas hasta que se asfixió. Se resistió, todos se resisten, pero todos acaban igual.
- Spoiler:
- Elias Grodin
Participantes restantes:
Nesta
Ultra-Sur
XenXo
Krwlng
Arshavin
Arriero
Iniesta
Anima Blaugrana
Detenidos:
orgullomadridist@
Asesinados:
Fingol
Elias Grodin
Asesino:
Última edición por toro85 el Vie Jun 08, 2012 9:43 pm, editado 1 vez