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Voy a por vosotros
…
Despierto y lo primero que hago es salir al balcón, aun es temprano y las calles están vacías. Me gusta mucho este clima, sentir el viento fresco en mi cara me hace sentir vivo. Después de la tensión de los exámenes me vendría genial un paseo por el campo. Me preparo una mochila ligera con algo de almuerzo y una botella de agua. También decido llevarme un periódico deportivo para ponerme al día.
Como suelo hacer habitualmente dejo mi coche a un lado de la carretera y me interno a paso rápido por los pinos. Me dirijo a mi zona secreta, ese lugar del bosque al lado del río en el que me relajo y medito.
Esta vez hay algo diferente, alguien está sentado en la misma roca, parece un joven y está escuchando música en alto desde su móvil.
Me acerco por detrás...sigilosamente, en los últimos metros pillo carrerilla y antes de que le dé tiempo a darse la vuelta le suelto una buena patada en la espalda empujándolo al río. ¡Paf!
El río apenas tiene caudal, y la caída no resultó demasiado aparatosa.
- ¿¿Pero qué coño haces??- Grita él en cuanto recupera el aliento.
- Perdona joder, me he tropezado - le contesto.
- Pero no me jodas lol...joder...ayúdame a subir anda...pero qué...
Es un chaval...lleva una camiseta del Barça, su cara es risueña a pesar del susto y nos reímos los dos con el “accidente” un rato. Mientras me río sonoramente recojo una piedra del suelo que pesará alrededor de los diez kilos con mi mano derecha y le digo que la mire. A continuación miro fijamente a sus desconcertados ojos y digo:
- Espero que te guste esta piedra, es la que va a partirte el cráneo.
Lo intenta pero ya poco puede hacer para esquivarme, al primer golpe ya ha caído inconsciente al suelo...pero no tengo ninguna intención de parar hasta que esté muerto, a los dos minutos de estar golpeándole me percato de que rato su corazón ya no late. No tenía ningún motivo para matar pero en ese momento...me di cuenta de que he nacido para esto.
Tampoco era mi intención inicial robar...pero veo que está su mochila al lado y decido rebuscar en ella. Encuentro un bolígrafo... escribo en una hoja de mi periódico el número 275, arranco el trozo de la página y lo meto en su boca desfigurada. Después saco de su mochila una cartera, en ella encuentro un par de billetes de veinte euros también encuentro su DNI y este dice....
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Despierto y lo primero que hago es salir al balcón, aun es temprano y las calles están vacías. Me gusta mucho este clima, sentir el viento fresco en mi cara me hace sentir vivo. Después de la tensión de los exámenes me vendría genial un paseo por el campo. Me preparo una mochila ligera con algo de almuerzo y una botella de agua. También decido llevarme un periódico deportivo para ponerme al día.
Como suelo hacer habitualmente dejo mi coche a un lado de la carretera y me interno a paso rápido por los pinos. Me dirijo a mi zona secreta, ese lugar del bosque al lado del río en el que me relajo y medito.
Esta vez hay algo diferente, alguien está sentado en la misma roca, parece un joven y está escuchando música en alto desde su móvil.
Me acerco por detrás...sigilosamente, en los últimos metros pillo carrerilla y antes de que le dé tiempo a darse la vuelta le suelto una buena patada en la espalda empujándolo al río. ¡Paf!
El río apenas tiene caudal, y la caída no resultó demasiado aparatosa.
- ¿¿Pero qué coño haces??- Grita él en cuanto recupera el aliento.
- Perdona joder, me he tropezado - le contesto.
- Pero no me jodas lol...joder...ayúdame a subir anda...pero qué...
Es un chaval...lleva una camiseta del Barça, su cara es risueña a pesar del susto y nos reímos los dos con el “accidente” un rato. Mientras me río sonoramente recojo una piedra del suelo que pesará alrededor de los diez kilos con mi mano derecha y le digo que la mire. A continuación miro fijamente a sus desconcertados ojos y digo:
- Espero que te guste esta piedra, es la que va a partirte el cráneo.
Lo intenta pero ya poco puede hacer para esquivarme, al primer golpe ya ha caído inconsciente al suelo...pero no tengo ninguna intención de parar hasta que esté muerto, a los dos minutos de estar golpeándole me percato de que rato su corazón ya no late. No tenía ningún motivo para matar pero en ese momento...me di cuenta de que he nacido para esto.
Tampoco era mi intención inicial robar...pero veo que está su mochila al lado y decido rebuscar en ella. Encuentro un bolígrafo... escribo en una hoja de mi periódico el número 275, arranco el trozo de la página y lo meto en su boca desfigurada. Después saco de su mochila una cartera, en ella encuentro un par de billetes de veinte euros también encuentro su DNI y este dice....
- Spoiler:
- Mr.Culé
