Hicimos un buen primer tiempo y el Atlético no nos creó peligro en ese periodo. Marcamos dos goles y tuvimos más ocasiones claras. En el segundo tiempo controlamos el partido bastante bien hasta la expulsión. Esa acción provocó que nos refugiáramos en el marcador y el Atlético nos metió dos goles en un minuto y se encontró con un marcador que no mereció.
¿Qué le provocó que tuviera que ser atendido?
Fue una piedra que me dio en el costado de la cara. El árbitro me preguntó si estaba bien y yo le respondí que no había ningún problema.
¿Vio peligrar el triunfo en algún momento?
Con 2-3, y el Atlético volcado, en cualquier jugada nos podían marcar y pasamos por momentos difíciles.
¿El juego del equipo empieza a parecerse a lo que usted quiere?
El equipo está asimilando un nueva forma de jugar y poco a poco lo vamos logrando. Salimos siempre a por los partidos y los jugadores me tienen muy contento. Les veo en buena forma y vamos a seguir alternando jugadores como hemos hecho durante toda la temporada.
La victoria era imprescindible para seguir metiendo presión al Barcelona...
No contaba con tener tantos puntos a estas alturas, porque 25 de 30 posibles es una enormidad. Ahora hay que tratar de lograr el pase en la Copa.