¿Quién mandaba en su gran Ajax de los 70?
Cruyff, a pesar de ser joven, tenía mucha personalidad. Con él me pasó una anécdota. Jugábamos en casa y mi camiseta con el 8 se había perdido. Buscamos y buscamos... y nada. Él me dijo: "Toma la mía del 9, yo jugaré con el 14". Y le fue tan bien que quiso llevar ese dorsal toda la vida, cuando la costumbre era vestir del 1 al 11. Pero el genio era Rinus Michels, que se inventó el ataque total. Jugábamos un 4-3-3. Con tres centrocampistas: Neeskens, Haan y yo; y con tres atacantes: Cruyff, Keizer y Rep. Y había un gran defensa, Krol. Sirvió para ganar tres Copas de Europa. En aquel tiempo éramos realmente mejores que el Madrid.
¿Se acuerda de la semifinal ante el Madrid en la 72-73? Luego fueron campeones.
¡Me acuerdo de todos los partidos ante el Madrid porque era el equipo de mis amores!
¿Lo era?
Y mi ídolo Puskas. Era el ejemplo de mi infancia. Hungría tenía un gran potencial y en el 56, Puskas salió de su país por la guerra. La primera vez que hablé con él en España me puse rojo como un tomate.
A usted se le reconoce como un ídolo en Holanda por su hazaña en el Bernabéu...
Recibí un pase largo en el centro del campo, la controlé y sin dejar que cayera di siete toques a la pelota...
¿No le abuchearon?
¡Todo el público aplaudía! He jugado siete veces contra el Madrid y gané las siete veces: tres con el Ajax, tres con el Betis y un amistoso. ¡Y contra el equipo de mis sueños!
Siete toques Dígame, ¿no era eso una humillación?
No era mi intención. Era un pase largo y vi que a mi espalda Krol se incorporaba al ataque. Era un recurso hasta que llegara. ¡Y lo hice bien, porque todos los jugadores del Madrid se quedaron mirando lo que hacía y dejaron de defender!
¿No molestó a los jugadores del Madrid?
Bueno, en una jugada posterior tuve que regatear a cuatro contrarios y sortear sus durísimas entradas No me cazaron. Después, en la calle, la gente me decía: "¡Cómo has podido, es un milagro!".
Fue un 0-1, gol suyo.
Un gol realmente feo, ¡pero era mi gol! Tiré a puerta y el balón rozó a Benito y a alguien más, hasta acabar en la red.
¿Quién era el mejor de aquel Madrid?
Amancio, un superclase.
¿En aquel Ajax también estaba su hermano Arnold?
Coincidimos tres años y medio, pero casi nunca jugó porque ocupaba mi puesto y yo era titular y mejor que él (risas).
Un problema para ambos.
Él dio el pase a Van Basten en su golazo de la Euro 88.
¿Cómo llegó al Betis?
A los 31 quise dejar el fútbol. Pero en el Betis había un delantero centro llamado Ladinsky, al que ya había dirigido Rinus Michels, y me llamó: "¿Quieres venir?". ¡Y fue mi mejor etapa individual! Teníamos un equipazo, con Cardeñosa, Gordillo Ganamos una Copa y quedamos terceros o cuartos en Liga.
La jugada sale al principio, lo demás prescindible si no sabes Holandes.
Que cabrón
Extraído de As.com
Cruyff, a pesar de ser joven, tenía mucha personalidad. Con él me pasó una anécdota. Jugábamos en casa y mi camiseta con el 8 se había perdido. Buscamos y buscamos... y nada. Él me dijo: "Toma la mía del 9, yo jugaré con el 14". Y le fue tan bien que quiso llevar ese dorsal toda la vida, cuando la costumbre era vestir del 1 al 11. Pero el genio era Rinus Michels, que se inventó el ataque total. Jugábamos un 4-3-3. Con tres centrocampistas: Neeskens, Haan y yo; y con tres atacantes: Cruyff, Keizer y Rep. Y había un gran defensa, Krol. Sirvió para ganar tres Copas de Europa. En aquel tiempo éramos realmente mejores que el Madrid.
¿Se acuerda de la semifinal ante el Madrid en la 72-73? Luego fueron campeones.
¡Me acuerdo de todos los partidos ante el Madrid porque era el equipo de mis amores!
¿Lo era?
Y mi ídolo Puskas. Era el ejemplo de mi infancia. Hungría tenía un gran potencial y en el 56, Puskas salió de su país por la guerra. La primera vez que hablé con él en España me puse rojo como un tomate.
A usted se le reconoce como un ídolo en Holanda por su hazaña en el Bernabéu...
Recibí un pase largo en el centro del campo, la controlé y sin dejar que cayera di siete toques a la pelota...
¿No le abuchearon?
¡Todo el público aplaudía! He jugado siete veces contra el Madrid y gané las siete veces: tres con el Ajax, tres con el Betis y un amistoso. ¡Y contra el equipo de mis sueños!
Siete toques Dígame, ¿no era eso una humillación?
No era mi intención. Era un pase largo y vi que a mi espalda Krol se incorporaba al ataque. Era un recurso hasta que llegara. ¡Y lo hice bien, porque todos los jugadores del Madrid se quedaron mirando lo que hacía y dejaron de defender!
¿No molestó a los jugadores del Madrid?
Bueno, en una jugada posterior tuve que regatear a cuatro contrarios y sortear sus durísimas entradas No me cazaron. Después, en la calle, la gente me decía: "¡Cómo has podido, es un milagro!".
Fue un 0-1, gol suyo.
Un gol realmente feo, ¡pero era mi gol! Tiré a puerta y el balón rozó a Benito y a alguien más, hasta acabar en la red.
¿Quién era el mejor de aquel Madrid?
Amancio, un superclase.
¿En aquel Ajax también estaba su hermano Arnold?
Coincidimos tres años y medio, pero casi nunca jugó porque ocupaba mi puesto y yo era titular y mejor que él (risas).
Un problema para ambos.
Él dio el pase a Van Basten en su golazo de la Euro 88.
¿Cómo llegó al Betis?
A los 31 quise dejar el fútbol. Pero en el Betis había un delantero centro llamado Ladinsky, al que ya había dirigido Rinus Michels, y me llamó: "¿Quieres venir?". ¡Y fue mi mejor etapa individual! Teníamos un equipazo, con Cardeñosa, Gordillo Ganamos una Copa y quedamos terceros o cuartos en Liga.
La jugada sale al principio, lo demás prescindible si no sabes Holandes.
Que cabrón
Extraído de As.com
Última edición por EL Guindilla el Jue Sep 16, 2010 4:05 am, editado 1 vez