En aguas del Atlántico Sur, 100 kilómetros al norte de las islas Malvinas, Reino Unido ha comenzado hoy a perforar el subsuelo para extraer petróleo y gas. La exploración petrolera en aguas del archipiélago recalentó en las últimas semanas las tensas relaciones con Argentina, que reclama la soberanía de las islas desde que los británicos las invadieron en 1833.
La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha negociado hoy en una cumbre en Cancún (México) con los jefes de Estado de los otros 32 países latinoamericanos y caribeños, incluidos los integrantes de la Commonwealth, una declaración a favor de "los legítimos derechos argentinos" sobre las Malvinas. Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Nicaragua, Daniel Ortega, así como Marco Aurélio García, asesor en política exterior del brasileño Lula da Silva, anticiparon el respaldo de la región a Argentina.
"A ti te hablo, reina de Inglaterra. Deja quieta a las Malvinas ", advirtió Chávez el domingo en Aló presidente.
Un portavoz de la empresa británica Desire Petroleum, que cuenta con una de las licencias otorgadas por las Malvinas para explorar las aguas circundantes, confirmó a la cadena BBC que la plataforma que contrató, la Ocean Guardian, ha comenzado esta mañana a buscar hidrocarburos. Si bien los cálculos más optimistas refieren que en las Malvinas puede haber hasta 60.000 millones de barriles de reservas de petróleo -más que todas las que tienen Argentina y Reino Unido juntos-, Desire aclara que sólo después de varios años de búsqueda se podrán explotar comercialmente 3.500 millones.
El portavoz opinó que su compañía está explorando en "aguas británicas" y aseguró que le tienen sin cuidado el decreto argentino que obliga a todos los barcos que naveguen entre el continente y las Malvinas a pedir permiso a Buenos Aires o las gestiones que emprenderá el ministro de Relaciones Exteriores argentino, Jorge Taiana, ante el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Además de Desire, otras cuatro petroleras podrán explorar en la zona.
Mientras tanto, el periódico británico Daily Mail publicó el domingo un artículo en el que una ex editora del diario malvinense Penguin News llamó a la presidenta argentina "vieja cara de plástico", por su presunta "afición a las cirugías estéticas". Mientras tanto, hackers argentinos atacaron la web del Penguin News y desplegaron en ella una bandera argentina.
La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ha negociado hoy en una cumbre en Cancún (México) con los jefes de Estado de los otros 32 países latinoamericanos y caribeños, incluidos los integrantes de la Commonwealth, una declaración a favor de "los legítimos derechos argentinos" sobre las Malvinas. Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Nicaragua, Daniel Ortega, así como Marco Aurélio García, asesor en política exterior del brasileño Lula da Silva, anticiparon el respaldo de la región a Argentina.
"A ti te hablo, reina de Inglaterra. Deja quieta a las Malvinas ", advirtió Chávez el domingo en Aló presidente.
Un portavoz de la empresa británica Desire Petroleum, que cuenta con una de las licencias otorgadas por las Malvinas para explorar las aguas circundantes, confirmó a la cadena BBC que la plataforma que contrató, la Ocean Guardian, ha comenzado esta mañana a buscar hidrocarburos. Si bien los cálculos más optimistas refieren que en las Malvinas puede haber hasta 60.000 millones de barriles de reservas de petróleo -más que todas las que tienen Argentina y Reino Unido juntos-, Desire aclara que sólo después de varios años de búsqueda se podrán explotar comercialmente 3.500 millones.
El portavoz opinó que su compañía está explorando en "aguas británicas" y aseguró que le tienen sin cuidado el decreto argentino que obliga a todos los barcos que naveguen entre el continente y las Malvinas a pedir permiso a Buenos Aires o las gestiones que emprenderá el ministro de Relaciones Exteriores argentino, Jorge Taiana, ante el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Además de Desire, otras cuatro petroleras podrán explorar en la zona.
Mientras tanto, el periódico británico Daily Mail publicó el domingo un artículo en el que una ex editora del diario malvinense Penguin News llamó a la presidenta argentina "vieja cara de plástico", por su presunta "afición a las cirugías estéticas". Mientras tanto, hackers argentinos atacaron la web del Penguin News y desplegaron en ella una bandera argentina.