Buenos días.
Como todos ustedes saben, hemos sido rescatados. No ha sido fácil, dado que nuestra imagen en Europa es de un país corrupto y desorganizado que ha vivido una era dorada debido a las ayudas europeas y a la especulación.
El rescate, tal y como ustedes sin duda habrán intuido, tendrá condiciones. Estoy convencido de que entenderán que nadie presta una cantidad de dinero tan enorme sin condiciones. Se harán públicas cuando la negociación esté definitivamente cerrada, pero es obvio que no serán agradables para nosotros. Teniendo en cuenta lo ocurrido en los demás países intervenidos, es probable que nos pidan que aumentemos el IVA, que retrasemos la edad de jubilación y que rebajemos la prestación por desempleo. Lógicamente, negociaremos con Europa hasta el último aliento, y les informaré personalmente del resultado de las negociaciones en cuanto sea posible.
¿Arreglará el rescate la situación de España? Les puedo garantizar que, al menos, evitará la muerte súbita. Y eso, en estos momentos, es mucho. Este rescate no generará empleo ni mejorará nuestro nivel de vida. Este dinero es para los bancos, para cubrir el enorme agujero que ha quedado tras tantos años de compulsiva inversión inmobiliaria que ahora apenas vale el precio del polvo que acumula. Los recortes en el Estado del Bienestar que estamos viviendo y que pronto tendremos que intensificar son, en definitiva, el precio de muchos años de irresponsabilidad financiera y política.
Bien.
Ahora, y antes de dar paso a las preguntas, me gustaría compartir con todos ustedes una reflexión que creo fundamental. Esta situación no se produce Deus ex Machina, y sería sumamente cínico decir que se debe en exclusiva a la crisis global o a la gestión del anterior Gobierno.
Lo cierto es que, durante décadas, en España hemos potenciado la cleptocracia, la cultura del pelotazo y la corrupción en todos los estamentos sociales. También en el político. Todos los gobiernos han apostado por la burbuja, el pelotazo y la especulación. Por la picaresca y la ley del mínimo esfuerzo. Ni siquiera hemos sido capaces de llegar a pactos mínimos de pura responsabilidad institucional, como el de la educación. Ciertamente, son cuestiones que deberían avergonzarnos a todos como españoles, empezando por nosotros, los responsables políticos.
Por eso quiero anunciarles que esta misma semana mantendré una reunión con el líder del Partido Socialista. Quiero que ese encuentro inaugure un proceso encaminado a replantear las bases mismas de nuestra democracia. A hacerla más sólida, transparente y justa. Es fundamental que esta crisis y sus terribles consecuencias sociales no sean en vano. Que sirvan para que todos comprendamos que el bienestar solo puede basarse en tres pilares. Solo en tres. Educación, esfuerzo y valores.
Gracias. Pueden preguntarme lo que deseen. Estoy para servirles.
http://www.eldiario.es/zonacritica/2012/06/11/discurso-de-rajoy-version-descartada/