A pesar de que los profesores andaluces de instituto cuentan con una carga lectiva que puede llegar hasta las 21 horas, una más que en Madrid, "si la distribución horaria del instituto lo exige", los sindicatos denominados de "clase" sólo protestan en Madrid y las demás comunidades gobernadas por el PP. Aducen que estos recortes en Andalucía, que tienen lugar desde 2010, son excepcionales, pero algunas de sus condiciones son incluso más graves que las aplicadas en Madrid.
Y desde luego, no se conoce protesta alguna de estos sindicatos por el hecho de que Andalucía está en la última posición de la calidad de la educación. Sólo cuando se tocan algunos privilegios de los profesores y siempre que el gobierno sea del PP. Nada se dice sobre el hecho de que Madrid es la primera comunidad en comprensión lectora, según el informe Pisa, mientras que Andalucía se encuentra la quinta por la cola y cuarta, también por la cola, en competencia matemática.
Cuenta El Mundo que la Consejería de Educación andaluza introdujo esta reforma el año pasado, a través de la orden de 20 de agosto de 2010, por la que se regula la organización y el funcionamiento de los institutos Secundaria, así como el horario de los centros, del alumnado y del profesorado. Está en vigor desde el curso pasado.
Y precisamente por ello, la Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía (Apia) ha presentado una demanda ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra la citada orden que empeora las condiciones laborales de los docentes, que ya ha sido admitida por la Sala de lo Contencioso-Administrativo con sede en Sevilla, en el recurso 773/2010. Según se desprende de sus declaraciones, UGT y CC.OO, que protestan en Madrid, no lo hicieron aquí.
El portavoz de Apia, Gonzalo Guijarro, criticó que los llamados "sindicatos de clase protestan en Madrid y aquí dicen amén a todo, ¿no tendrá algo que ver con las ingentes subvenciones que reciben de la Junta?".
Con la ampliación del horario lectivo de los profesores de instituto, la Consejería de Educación ha modificado "de facto, sin negociación colectiva previa, como prescribe el Estatuto Básico del Empleado Público, el horario de los profesores de Secundaria, lo que ha supuesto un retroceso en nuestras condiciones laborales de casi un cuarto de siglo", advirtió Apia.
Ahora, la parte lectiva del horario semanal ha vuelto a ser fijada en "un mínimo de 18 horas, pudiendo llegar excepcionalmente a 21", a pesar de que la resolución de noviembre de 1987 –que regulaba anteriormente el horario– contempló la duración de 18 horas de la jornada lectiva semanal "con carácter general " y condicionó su superación "excepcional y extraordinaria a una compensación de dos horas complementarias por cada hora lectiva de más". ANPE, CCOO, CSIF, UGT y Ustea, muy críticos con el PP, precisaron que la norma andaluza prevé 21 horas lectivas, pero de forma "excepcional", mientras que en Madrid, el horario laboral habitual ha pasado de 18 a 20 horas.
El recorte en Andalucía va más allá, ya que la "compensación de dos horas complementarias por cada hora lectiva de más" ha desaparecido de la actual regulación. Con este sistema, al profesor que tuviera más horas lectivas –de clase real con los alumnos– se le compensaba, por ejemplo, quitándole horas de guardias o de mantenimiento del material didáctico, explicó Gonzalo Guijarro.
En Andalucía es aún peor puesto que la orden aprobada el año pasado por la Consejería de Educación ha creado una nueva función de los docentes, no recogida explícitamente en la ya derogada orden de 9 de septiembre de 1997, como hacer guardias en periodo de recreo, es decir, fuera del horario lectivo de los alumnos. Las guardias en los recreos generan "un formidable problema de inseguridad jurídica al lanzarnos, absolutamente inermes, a ejercer de guardianes de grupos de hasta 200 alumnos de entre 12 y 18 años, todos mezclados", señaló Apia. Pero aquí no hay protestas Salvo la que ha hecho APIA. Sólo en Madrid y donde gobierne el PP
es lo de siempre, si lo hace el PSOE está bien, si lo hace el PP hay protestas; bendito país vendido a la izquierda.
saludos