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El expresidente Jose María Aznar ha acudido en calidad de líder nacional y caudillo ha defender Melilla del acoso de las ordas de infieles.
Cual Julio Cesar, Jose María Aznar, llegó, vió y venció. Él, cual Cesar, ya derrotó una vez al malvado enemigo y ha demostrado con su presencia, que lo volvería a hacer una vez más.
En fin, a mi me parece francamente ridículo su acto de presencia en Melilla por varios motivos:
- Excesivo ego, si, ya sabemos todos que Aznar nos libró de la invasión musulmana derrotando a los hordas moras en Perejil. Ya sabemos que es el héroe nacional, no hace falta que nos lo recuerde con su presencia.
- Defiende y muestra su apoyo a la Policia y a la Guardia Civil del acoso al que fueron sometidos por El Mundo, La Cope y el PP por montar una conspiración contra el Gobierno y mentir en el 11-M ... ah, no, perdón, del acoso al que se ven sometidos por los marroquies.
- Tal vez, digo tal vez, debería nuestro macho nacional ir a Gibraltar, a defender la españolidad de la zona y la dejadez del Campo de Gibraltar.
Pero no, el enemigo es el musulman y no los angloparlantes, que esos me dan dinero en Conferencias y puestos directivos.
- Luego, mi opinión personal de estos machos, caudillos y líderes, es que jamás tendrían cojones de ir a una guerra, ni ellos ni sus hijos que estudian en EEUU y buscan un futuro de muchos miles de euros enchufados en alguna gran compañia, jamás ninguno hará carrera militar ni ingresará en ningún Cuerpo de la Policia o de la Guardia Civil.
Esto lo digo porque esa actitud bravucona y desafiante que tienen, hablo en plural aqui ya que incluyo al Dictador Mohamed VI, sobrino de Juan Carlos I (según las propias palabras de Juan Carlos I de Borbon), son muy machos jugando con las vidas de los demás, como ya demostraron en el Perejil, donde si algo hubiese salido mal, hubiese habido muertos y quién sabe que hubiese sucedido después.
En fin, que la actitud de algunos marroquies es machista, retrógada y estúpida, pero la visita de Aznar en modo libertador no me ha gustado.
Cual Julio Cesar, Jose María Aznar, llegó, vió y venció. Él, cual Cesar, ya derrotó una vez al malvado enemigo y ha demostrado con su presencia, que lo volvería a hacer una vez más.
En fin, a mi me parece francamente ridículo su acto de presencia en Melilla por varios motivos:
- Excesivo ego, si, ya sabemos todos que Aznar nos libró de la invasión musulmana derrotando a los hordas moras en Perejil. Ya sabemos que es el héroe nacional, no hace falta que nos lo recuerde con su presencia.
- Defiende y muestra su apoyo a la Policia y a la Guardia Civil del acoso al que fueron sometidos por El Mundo, La Cope y el PP por montar una conspiración contra el Gobierno y mentir en el 11-M ... ah, no, perdón, del acoso al que se ven sometidos por los marroquies.
- Tal vez, digo tal vez, debería nuestro macho nacional ir a Gibraltar, a defender la españolidad de la zona y la dejadez del Campo de Gibraltar.
Pero no, el enemigo es el musulman y no los angloparlantes, que esos me dan dinero en Conferencias y puestos directivos.
- Luego, mi opinión personal de estos machos, caudillos y líderes, es que jamás tendrían cojones de ir a una guerra, ni ellos ni sus hijos que estudian en EEUU y buscan un futuro de muchos miles de euros enchufados en alguna gran compañia, jamás ninguno hará carrera militar ni ingresará en ningún Cuerpo de la Policia o de la Guardia Civil.
Esto lo digo porque esa actitud bravucona y desafiante que tienen, hablo en plural aqui ya que incluyo al Dictador Mohamed VI, sobrino de Juan Carlos I (según las propias palabras de Juan Carlos I de Borbon), son muy machos jugando con las vidas de los demás, como ya demostraron en el Perejil, donde si algo hubiese salido mal, hubiese habido muertos y quién sabe que hubiese sucedido después.
En fin, que la actitud de algunos marroquies es machista, retrógada y estúpida, pero la visita de Aznar en modo libertador no me ha gustado.
