Aye escribió: Shearer escribió: Aye escribió: Shearer escribió: Aye escribió: Shearer escribió: Aye escribió: pantuflo escribió: gargallo escribió:Sólo se trata de la ilusión de despedir el año que se va y dar la bienvenida al que llega esperando que sea mejor que el anterior, así de simple. Lo que programen o no programen en tv es cuestión de gustos, habrá quien vea ese tipo de programas y otros que los desechen.
Lo de ver las campanadas y comerse las uvas es simplemente una liturgia de superstición, las campanadas son el momento especial en el que las personas sacan a relucir sus deseos de futuro y realizan un gesto que les haga pasar al año nuevo con alegría. Se dice que la costumbre de comer uvas, lentejas en Italia, se tomó aquí a partir de que un año se comenzó a hacer de esta manera por un excedente de cosecha a raíz del cual hubo quien repartió uvas para tal menester.
Que quieres que te diga, independientemente de que la programación en tv sea mejor o peor, a mi me gusta despedir el año con alegría y con esa liturgia. No creo que mi dignidad esté en peligro por ello. Para mi, respetando las ideas de los demás, sería más indigno que llevase el retrato de un fascista en mi firma.
que pesao eres con el fascista macho, ignorado quedas. se me ha olvidado poner que era un post que no hay que tomar al pie de la letra, es una puta broma bastante mala, pero no considero indigno ver a bertin y jose luis moreno , yo voy a hacer lo que pone en el post, y encima no podre beber porque tomo antibioticos.
pregunta a gargallo, aunque no podre leer la respuesta porque te voy a ignorar por pesao con lo de fascista ¿ puede ser alguien del real madrid que haya nacido en 1492 ?
Hombre, la fama de fascista, aunque en este hilo no tiene nada que ver, te la ganas a pulso, con los comentarios que se te leen a menudo por aquí. A parte, llevar a Bismarck en la firma no ayuda a quitar esta imagen
Como dice pantuflo, Bismarck no puede ser calificado de fascista porque la definicion de fascista proviene de finales de los 20, con Mussolini en Italia. Bismarck era imperialista, pero no fascista.
Si no digo que Bismarck sea fascista. Solo que no ayuda mucho tener una imagen de Bismarck en la firma cuando se te suele tildar de fascista. Más que nada porque aunque fué contrario al nacionalsocialismo (a veces porque era un veleta) era uno de los musos de Hitler en sus delirios expansionistas.
Por cierto pantuflo, aunque los del foro Babel piensen radicalmente de manera opuesta a mi manera de pensar, no los puedo considerar fascistas, solo unos mentirosos de la peor calaña en que la mayoria de sus argumentos lingüisticos no hay por donde cojerlos (como que alguno de ellos ha dicho que el catalan es un dialecto, entre otras perlas).
No lo decia por ti, sino por Gargallo que ha afirmado que Bismarck era fascista.
Por cierto, Federico el Grande era el principal "muso" de Hitler, no Bismarck. Tb vamos a considerar a Federico el Grande fascista?
A ver, te he dicho que Hitler admiraba Bismarck (no el que más pero el reflejo del primer Reich de Bismarck está allí con el del tercero de Hitler) y he dicho que no por eso Bismark era fascista (de Hecho ni Hitler era fascista, era nazi). Entonces de donde sacas tu conclusión de que deba considerar a Federeico el Grande fascista?
Bueno, pues Aye, tildamos a Federico Barbarroja de nazi entonces (fascista no, nazi).
Que a lo que iba. No era por ti, era por gargallo, que puso que la foto era de un fascista. Lo otro simplemente era por ser quisquilloso con la historia, que me mola cantidad, y si es de los nazis y la segunda guerra mundial, mas todavia.
Joderrrrrrrr que no digo que sea nazi. Solo que no ayuda a quitarte el estigma de fascista
(que se está ganando pantuflo por otras causas)que te guste un político/rei admirado por Hitler. No que estos sean ni fascistas ni nazis.
Tildamos al compositor Wagner como nazi también? al gustarle a Hitler...
otras causas ? por mi aficion a los toros, al madri, por defender lalengua de mis abuelos , padres.. , sera porque me pongo cachondo cuando la seleccion gana la eurocopa, porque no pieso como tu, o me vas a sacar lo de la foto quemada de franco, o simplemente porque te apetece que sea fascista para que te cuadre el mundo que te has montado, o la cataluña que os habeis montado de Caixa, Racc, Barça, Moreneta y Orfeo, y en la que el que no pasa por el aro o es fascista o nazi, aqui no hay otra opción .
y lo del dialecto espero que me pases el enlace donde arcadi espada dice que es un dialecto del castellano, para er si es un texto humoristico, un entrecomillado , o lo dice cientificamente. yo solamente he encontrado esto en una entrevista que le hacen en el cultural.es
P: ¿Cuáles son los efectos benéficos de la política lingöística de Generalitat?
R: La política lingöística de Generalitat no tiene ninguna importancia. Ni buena ni mala.
El catalán es un mero dialecto del castellano, o viceversa, según quién mand
otro escrito
A principios de los años 80, un porcentaje muy exiguo de ciudadanos conocía de modo completo (comprensión, habla y escritura) la lengua catalana. La inmersión, aliada con la creación y desarrollo de TV3, ha sido un éxito y ese porcentaje ha aumentado de modo espectacular. Hoy en Cataluña cualquier alfabetizado lo es también en catalán. Y, desde luego, también en castellano: se trata de una lengua muy poderosa, de la lengua común de los españoles y de la lengua materna de la mitad de los ciudadanos catalanes; por si fuera poco,
castellano y catalán son dos lenguas gemelas, dialecto una de la otra. Un cierto equilibrio se ha mantenido. Excepto en el establishment. Poco a poco los políticos catalanes han ido apartando al castellano de los ámbitos institucionales (pesadamente simbólicos), de la cordialidad pública, y han acabado tomando decisiones grotescas, como la aprobación del manual de uso lingüístico de los medios de comunicación, o claramente atentatorias contra la libertad, como las sanciones a los comercios. Una parte de la sociedad catalana se ha sentido humillada, y lo que tomó cuerpo político con Ciutadans ya forma parte destacada y novedosa del programa político del primer partido de la oposición: la exigencia de que el castellano sea también lengua de la enseñanza. El argumento que la sostiene es irrebatible: ¿cómo es posible que un ciudadano no pueda elegir la lengua oficial del Estado para educar a sus hijos?
Arcadi Espada. Episodios de la vida de un hombre.
21/12/99
Publicado en Quintacolumnismo. Espasa Calpe. Madrid 2003
Empezaba a hablar la otra tarde sobre nacionalismo y periodismo, en un aula de la Facultad de Filosofía de la Universídad de Barcelona, cuando alguien gritó «¡Fascista!» y acto seguido corearon esa voz unos quince. Con discreción miré a un lado y otro de la mesa, pero en la mesa todos mis compafieros me miraban. Como seguían los gritos y aún dudaba de que fuera a mí a quien estaban llamando fascista, tuve la postrera tentación de ir hacia el grupo de muchachos y adherirme para gritar todos juntos contra el cabrón fascista. Pero no podía ser, de ninguna manera, porque el cabrón, ya lo sabía, era yo. Realmente todo era muy, muy confuso. Hacían explotar algunas bombas fétidas -yo las fabricaba de niño con el Cheminova- y luego gritaban « ¡Vuestra democracia hiede! » (traducido libremente del catalán), sin atender a la evidencia de que no olía así antes de que ellos entraran. En esa danza estuvieron unos minutos y luego se largaron escupiendo, y yo aproveché para hablar sobre el tema previsto.
Por la noche dormí mal. No creo que fuera por ellos, sino más bien por las copas de un gran Hermitage que mi mujer y yo bebimos para cambiar de trago. Puesto en el insomnio y para hacer algo, y dado que tenía las uñas muy crecidas, me fui rascando el brazo con ritmo cada vez más vivo. Estaba tumbado en la cama, con la oreja pegada al brazo y las uñas arriba y abajo. Las uñas acabaron siendo las botas y mi brazo los adoquines, y lo que escuchaba, un siniestro rac-rac, era el ruido de un batallón fascista desfilando. La noche es el reino de muy tétricas ilusiones, pero si yo era capaz de marchar sobre Roma con mis uñas y mi brazo, algo de razón debían de tener los muchachos.
Pensé en mi vida. La primera vez que le grité fascista a alguien fue a don Florencio Caballero Valladares, se deduce que más que hombre, medieval fortaleza. Nos tuvo seis años formando en el patio del instituto -sin otra dispensa que la lluvia- mientras subía al mástil la bandera roja y gualda, sonaba la Marcha Real y se rezaba la oración de la mañana, a san Fernando, patrón de la juventud española. Todo eso pasó durante seis años y nos pasó por cobardes, pero la lección la aprendí luego y no va con esto. La última vez, coreada, fue en febrero de 1981. Aquella noche llovía y hacía viento y frío, y éramos muy pocos en las calles de Barcelona los que le gritábamos fascista al guardia civil Tejero. El Departamento de Estado norteamericano y el nacionalismo catalán habían coincidido en considerar que el golpe era un asunto interno de los españoles.
Entre esa noche despoblada y la otra tarde pasaron algunos años y mientras tanto aprendí a restringir el uso del apelativo fascista. Se trata de una de esas palabras demasiado grandes. El vulgo cree que las grandes palabras hacen gran daño, y se equivoca. Cuando las palabras no tienen la medida justa del concepto ocultan más que evidencian. Por eso es mucho mejor, para el entendimiento de las cosas, llamar nacionalistas o índependentistas a los muchachos antes que radicales, extremístas o -justamente- fascistas: al fin y al cabo, de la bandera catalana que estaban ondeando al compás de sus insultos no prendía ningún fascio.
P
ero, bueno, el asunto es que me lo habían llamado a mí. Tal vez no les faltaran razones. De las paredes, en el aula, habían colgado carteles con la siguiente sentencia: «El catalán es un dialecto del castellano. Arcadi Espada». Es verdad que cuando, en otro tiempo, alguien decía esa frase yo creía que estaba delante de un fascista. No podía negar, tampoco, que la frase era cierta: ritualmente la pronuncio ante mis alumnos de la Pompeu Fabra cuando quiero ilustrarlos acerca de la relación entre lengua y poder. Luego les añado: «... 0 el castellano es un dialecto del catalán. Depende de quien mande». Pero ni la frase cabía entera en el cartel, ni se puede ir por el mundo provocando. Sé que esto último es lo que ha querido decir el presidente Jordi Pujol, mirándonos la minifalda: «Es que van provocando... y luego pasa lo que pasa».
Todas esas razones presuntas empalidecen, sin embargo, ante la esencial razón cronológica: está escrito que alguien, en cualquier circunstancia, llegará un día hasta tu frente y te Hamará fascista. Te lo llamarán en la oficina, en el aula, o en la cama. Tú quizá estés, como yo, en torno a los cuarenta años, y cuando lo oigas también buscarás al cabrón con la mirada, sin hallarlo. Entonces te sentirás un Villar Palasí o un GarcíaValdecasas. Al reponerte, copiarás estos versos: «Fue un verano feliz. / El último verano de nuestra juventud».
Ahora bien, voy a darte un consejo, ya por viejo: procura siempre que los que te llamen fascista sean un grupo de niñatos subvencionados, que no se pagan la bandera ni las bombas fétidas; unos niñatos eximidos por la autoridad máxima del gobierno: sus lactantes; procura que quien te lo llame sea el poder, aun en su versión de falange y muchachada; fascista serás, pero en la intemperie.
No sabes cómo rejuvenece.
creo que dista un poco de lo que dices Aye. P.S de las doce uvas con las que se inició ,a esto, gracias a Otto, de verdad que es maravillosa la vida.