El Gobierno municipal de Ana Botella ha aprobado este año el recorte de algunas ayudas sociales y premios de antigüedad, aunque sin tocar el salario ni el número de empleados, y ha reducido en dos tercios el número de representantes de los sindicatos en el consistorio, en concreto 268 de los 398 liberados institucionales y delegados sindicales que había.
y la respuesta de los sindicaleros ha sido cortar Colón, Cibeles y Acalá hasta Gran Vía y me ha pillado en medio. Estos funcionarios de poca monta, que viven en una burbuja privilegiada, se ha dedicado a perjudicar a los trabajadores que de verdad levanta este país, se creen con derecho a todo y no dudan en pisotear el derecho de los demás
son una casta parasitaria que viven a costa de los trabajadores que dedican mucho tiempo y esfuerzo en salir adelante y tienen las narices de ir por la vida de socialistas y de defender a la clase obrera, la mejor manera de defender a un obrero es dejarle trabajar y no impedir que se pueda desplazar para realizar su trabajo.
pensaba que Panceto exageraba en sus críticas, ahora pienso que se queda corto.
Por cierto, no vengais con la demagogia de los bomberos, policías, médicos, etc,... los que cortaron las calles son personal administrativo que "trabaja" de 9 a 2 con un buen descanso entre medias.
un saludo.