Algunos inconscientes se han alegrado de la intención de seguir de este individuo. Os comento ciertas carencias que vamos a tener con este sujeto.
Mourinho es un entrenador especulador y que se adapta al rival. Es decir, contra el Sporting saldrá a avasallar, contra un equipo que considere peligroso a nivel ofensivo se echará atrás y esperará a las contras. Hay muchas formas de echarse atrás, no solo colocando cinco defensas. Simplemente escogiendo un trivotito defensivo, por ejemplo. Iré una paso más allá. La naturaleza defensiva de Mou se demuestra en cada once que saca al campo. Su dupla de medios preferida es Alonso y Khedira, dos jugadores de evidente corte defensivo. Y ojo, ellos forman parte de sus onces más ofensivos. Mou utiliza el mediocampo como un elemento esencialmente defensivo y destructor, no lo enfoca como parte ofensiva y de creación. Tampoco hay conducción ni llegada. Esto genera gravísimos problemas cuando te topas con equipos de calidad a la hora de mover el balón...persigues sombras, claro, y lo peor es que la presión arriba suele derivar en un desgaste físico tremendo e insostenible los 90 minutos. Normal, cuando recuperas el balón no te dura tres pases seguidos, y vuelta a correr. Total, la naturaleza de la plantilla te condena a ese futbol agazapado, ruín y dosificado made in Mou. Ni siquiera ha de ser un Barça para excusarse en ese futbol, le basta cualquier equipo con cierto potencial ofensivo para ofrecernos ese dudoso espectaculo, tal y como demostró ayer.
Muchos defienden que Mou juega bien las bazas que tiene...bueno amigos, pero es que esas bazas son las que se ha buscado él mismo. Nadie le ha puesto una pistola a Mou para que juegue con dos jugadores de corte defensivo y de escaso manejo de balón. Los tiene él ahí porque son los que ha querido y seleccionado. Mou quiere jugar así. No quiere jugar a otra cosa.
Su mentalidad de adaptarse al rival y al marcador le hacen idóneo para un equipo de media tabla alta, pongamos un Valencia o un Sevilla, pero es absurdo tirar de este tipo con equipos que podrían tener juego y plantilla para comerse a los rivales desde el minuto 1 al 90. No voy a descubrir nada, ahí teneis sus logros, a base de aparcar autobuses, a base de ganar suplicandole al reloj, a base de llevarse los partidos por la mínima y a base de suerte, mucha suerte.
Mourinho es un entrenador especulador y que se adapta al rival. Es decir, contra el Sporting saldrá a avasallar, contra un equipo que considere peligroso a nivel ofensivo se echará atrás y esperará a las contras. Hay muchas formas de echarse atrás, no solo colocando cinco defensas. Simplemente escogiendo un trivotito defensivo, por ejemplo. Iré una paso más allá. La naturaleza defensiva de Mou se demuestra en cada once que saca al campo. Su dupla de medios preferida es Alonso y Khedira, dos jugadores de evidente corte defensivo. Y ojo, ellos forman parte de sus onces más ofensivos. Mou utiliza el mediocampo como un elemento esencialmente defensivo y destructor, no lo enfoca como parte ofensiva y de creación. Tampoco hay conducción ni llegada. Esto genera gravísimos problemas cuando te topas con equipos de calidad a la hora de mover el balón...persigues sombras, claro, y lo peor es que la presión arriba suele derivar en un desgaste físico tremendo e insostenible los 90 minutos. Normal, cuando recuperas el balón no te dura tres pases seguidos, y vuelta a correr. Total, la naturaleza de la plantilla te condena a ese futbol agazapado, ruín y dosificado made in Mou. Ni siquiera ha de ser un Barça para excusarse en ese futbol, le basta cualquier equipo con cierto potencial ofensivo para ofrecernos ese dudoso espectaculo, tal y como demostró ayer.
Muchos defienden que Mou juega bien las bazas que tiene...bueno amigos, pero es que esas bazas son las que se ha buscado él mismo. Nadie le ha puesto una pistola a Mou para que juegue con dos jugadores de corte defensivo y de escaso manejo de balón. Los tiene él ahí porque son los que ha querido y seleccionado. Mou quiere jugar así. No quiere jugar a otra cosa.
Su mentalidad de adaptarse al rival y al marcador le hacen idóneo para un equipo de media tabla alta, pongamos un Valencia o un Sevilla, pero es absurdo tirar de este tipo con equipos que podrían tener juego y plantilla para comerse a los rivales desde el minuto 1 al 90. No voy a descubrir nada, ahí teneis sus logros, a base de aparcar autobuses, a base de ganar suplicandole al reloj, a base de llevarse los partidos por la mínima y a base de suerte, mucha suerte.