Nos espera otro año ganándolo todo, al igual que el Barça, y jugándonos los títulos en los enfrentamientos directos con los culés.
Y yo ya empiezo a estar harto de los clásicos.
No porque nos cueste ganarlos, que también , sino sobretodo porque dejan un reguero de mierda tremebunda en forma de insultos, patadas, expulsiones, polémicas, declaraciones salidas de tono, presión mediática, etcétera.
Tendremos 60 partidos más o menos aburridos, ganando casi todo con facilidad, sin emoción, y luego 3 o 4 de máxima tensión... y vergüenza ajena (por blancos y azulgranas).
Si la cosa sigue así, y muy a mi pesar, la única solución que veo para que esto recupere atractivo es la creación de esa súper liga europea.