Sniper escribió:Que no, que no cuela. El responsable no es Floripondio, el culpable es el COBARDE del entrenador.
Sí, cobarde con mayúsculas porque por muchos condicionantes que tenga, un entrenador con PERSONALIDAD arma primero un equipo y esto implica tomar decisiones. Si Bale, Benzema, James o quien sea no encajan, banquillo, y si el presidente se enfada lo tiene muy fácil "La cuenta por favor" Y QUEDAS COMO UN SEÑOR.
Pero no, lo que está haciendo este señor es la Delboscada del rigor. Meter todos los jugadores, a pierna cambiada, fuera de posición y "a ver lo que sale"; sin esquema, sin plan, sin entrenamiento, sin táctica. Es un disparate.
Se habla de actitud, de falta de intensidad pero hay un error de base, todo eso parte del TRABAJO. A los jugadores se les nota fuera de sitio, distraídos, sin plan, sin referencias; cada uno hace la guerra por su cuenta y esto no es falta de intensidad ES QUE NO HAY PLAN, COJONES. Se juega como se entrena, esa es la puñetera máxima. ¿A qué entrena el Madrid?
El equipo tiene alternativas, tiene efectivos para variar dibujos y buscar soluciones pero claro, esto implica tomar DECISIONES. Y sí, esto suele conllevar caretos y morritos de unos u otros, pero coño, señores ¡PARA ESO LE PAGAN A UN ENTRENADOR! Eso forma parte de su trabajo; lo que no forma parte de su trabajo es contentar a todo el mundo o lamerle el culo al presidente. Y repito, si no puede "por presiones", pides la cuenta y dejas al presidente con el culo al aire.
Es vergonzoso lo de este señor.
Camacho: 'Salí del Madrid porque vi que sobraba'
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Para mi sorpresa era todo lo demás y después el fútbol'
'Todos balones de oro, pero hay que correr, trabajar y vivir por esta profesión'
'Florentino no creía en la dirección deportiva'
Dos años y medio después de su sorprendente renuncia como entrenador del Real Madrid llegó la hora de contar la verdad para José Antonio Camacho: aquellos tres meses al frente del equipo blanco fueron un "tormento" El técnico presentó la renuncia al ver que "sobraba" en un club donde la prioridad no era el fútbol.
"Tú querías hacer un entrenamiento por la tarde y no podías, porque había una planificación extradeportiva. Hablé con el presidente (...) pero ahí no nabía nada que hacer. Me dije: aquí sobro", relata Camacho en una entrevista a un diario alemán.
Camacho, ex seleccionador nacional español, llegó al club que por entonces presidía Florentino Pérez tras el final de Carlos Queiroz, a mediados de 2004. Pero en septiembre de ese año renunció al club tras disputar sólo seis partidos oficiales, tres de Liga y tres de Liga de Campeones. Sumó cuatro victorias y dos derrotas, éstas consecutivas, y tiró la toalla ante la imposibilidad de manejar el vestuario, algo que confirma ahora.
El entrenador y ex jugador blanco tiene claro cuándo comenzaron a surgir los problemas: "En el momento en que dejó de fichar la dirección deportiva, de eso puedo dar fe, porque fui tres meses entrenador y me fui por este motivo".
"En este tiempo el Madrid adquirió seguramemte la mayor dimensión internacional de su historia, lo que ya es algo, al ser el club más importante del siglo XX, y por este motivo pudo llevare a los mejores jugadores del mundo. Pero no se dieron los pasos para hacer el mejor equipo", insiste.
La política de los 'galácticos', contratar una megaestrella por temporada, fue un error de Pérez, considera Camacho. "Es muy difícil meter cuatro o cinco balones de oro en un mismo vestuario, eso no lleva a ningún lado, sólo a perjuicios como ha quedado demostrado con el tiempo. Nunca en la historia del Madrid o de ningún otro club se ficharon cuatro o cinco balones de oro de golpe. No es lo mismo que alguien venga con el balón de oro, siéndolo, a que lo obtenga aquí, es una gran diferencia".
Y la referencia al 'Balón de Oro' le sirve a Camacho para enlazar con lo que sucede actualmente en el club. "Los que han venido aquí no obtuvieron el balón de oro por su rendimiento en el Real Madrid, sino por lo que hicieron en el Barcelona, la Juve o el Inter. No alcanzaron aquí su máximo nivel deportivo. No llegaron aquí con 23, 24 años, sino con 27, 28, 29. Vinieron acá, por así decirlo, para retirarse deportivamemte".
Camacho da un ejemplo: "Cannavaro, una gran persona y un gran deportista. Le han dado el balón de oro, el premio FIFA y el de mejor jugador de Italia por su rendimiento en la Juve y en la selección. ¿Le van a dar todos esos premios el año que viene? Seguramente no. El balón de oro seguramente no se lo van a dar a ningún jugador del Madrid".
Camacho responde sin dudar cuando se le pregunta si aquellas semanas entrenando al Real Madrid fueron un "tormento". "Para mí sí. Desde un punto de vista publicitario vinieron cinco multinacionales, todo fue publicidad, publicidad, publicidad. Al comienzo estaba convencido de que el fútbol estaba por encima de todo, pero para mi sorpresa era todo lo demás y después el fútbol".
Intenta también dejar en claro que nunca tuvo un problema personal con el delantero inglés Michael Owen, sino con la forma en que se lo impusieron en el equipo. "No era con Owen, nada contra Owen, sólo que con Owen llegaba otro Balón de Oro a un vestuario donde había un balón de oro (Ronaldo) que jugaba de delantero centro como Owen".
"Y otro delantero como Morientes", le recuerda el periodista. "Exacto. Al que yo había traído personalmente porque había sido jugador del Madrid y lo acababan de elegir mejor jugador de la Champions. Si traes un Balón de Oro tiene que jugar. Llega un momento que dices, bueno, todos balones de oro, pero hay que correr, trabajar y vivir por esta profesión".
Con la perspectiva del tiempo pasado, Camacho analiza a Pérez, que renunció en la mitad de su segundo período como presidente del club debido a una crisis de resultados y reconociendo públicamente que se había equivocado en la laxitud del trato a los jugadores.
"El no creía en la dirección deportiva, sino que se fichaba a los mejores jugadores, se los mandaba al campo, jugaban y ganaban. Al comienzo funcionó porque había un equipo hecho. Luego trajo a Figo, Zidane, Ronaldo, Beckham y al final lo que había era un galimatías futbolístico".
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