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ciberxtrem escribió:Me parece surrealista la opinión de algunos foreros sobre uno del segundo mejor presidente en la historia del madrid en mi opinión.
Copio y pego la opinión de obituario de Elmi7o ya que me ha parecido excepcionalmente bien explicado, únicamanete que yo no tengo dudas de que ya es hora de dejar de hacer experimentos y poner una de las mejores plantillas en manos del mejor entrenador del mundo:
Florentino Pérez es el señor que situó al Real Madrid institucional, social y económicamente en el siglo XXI y lo devolvió al número uno en el orden de la élite futbolística mundial, lugar que, pese a las dos copas de Europa en 3 años de Sanz y alguna buena racha de jugadores y títulos como la de la Quinta del Buitre, llevábamos sobre los 30 años sin ver ni de lejos.
Tuvo 3 temporadas fantásticas en las que, independientemente de la cantidad de títulos conseguidos, en cualquier torneo disputado figurábamos siempre el primero en la lista de favoritos. Ganar o no es cuestión de detalles a veces muy pequeños y muy injustos, pero lo importante es estar siempre en la pomada y nosotros lo estuvimos en todas las competiciones. Los tres o cuatro mejores jugadores del mundo jugaban en nuestro equipo, pocas veces en la historia se ha visto tanto talento individual reunido en un equipo. Eramos la envidia y la admiración del mundo.
El cuarto año se cometen errores en la confección de la plantilla. Salen del equipo gente que había sido muy importante como Hierro o Makelelele y en vez de sustituirlos con jugadores de primer nivel se decide dar el empujón definitivo a la cacareada generación de "los pavones". A la vez se acomete por primera vez un fichaje más relacionado con el marketing que con el fútbol. Aquello, desde mi punto de vista marco un punto de inflexión. Atrajo hacia el Real Madrid la mirada de un montón de medios no relacionados con el deporte y con una influencia absolutamente perniciosa en el entorno del club. Empieza a rodearnos una presión social (no solo deportiva) demoledora. Fiestas de cumpleaños, no-bodas etc empiezan a salir a la luz. El exceso de focos de diversos ámbitos empieza a generar una erosión en la imagen tanto del club como de sus futbolistas a la vez que nos provoca estar más pendientes de asuntos extraños que de lo meramente futbolístico. Y toda aquella presión no solo recae sobre los "galácticos" si no también sobre aquellos chavales recién salidos del huevo que eran los encargados de darles descanso. La consecuencia la conocemos todos. Un equipo que tenía casi agarrado con las dos manos el triplete terminó quedándose en blanco.
El Madrid de Florentino jamás se recuperó de aquello. Valdano salió del club. Llegaron los Sacchi, Floro y una lista interminable de entrenadores. Se empezó a fichar según el criterio de los cuatro "opinadores" profesionales de la prensa. Nos encontramos como rival con un Barcelona que acertó en dos o tres fichajes estratégicos y se convirtió en un gran equipo a la vez que nosotros nos descubrimos
en el problema de jubilar a unos jugadores deportiva y sentimentalmente casi imposibles de sustituir.
Mi conclusión es que Florentino fue un presidente inmejorable en las buenas pero que no supo encontrar la tecla con la que cambiar la inercia cuando vinieron mal dadas, lo que permitió que el monstruo (en cuanto a su dimensión) que había creado muriera victima de su propia grandeza.
Este verano volvió y provocó un efecto parecido, o incluso superior, al de su primera aparición en un Madridismo muy desilusionado, lo cual deja claro que el principio fundamental de su filosofía tiene virtudes casi terapéuticas sobre el animo, la esperanza y el orgullo de ese bastión esencial que los aficionados encarnamos.
Se han cometido errores, como nuestra humana naturaleza exige, pero pese a ello yo creo que el modelo institucional no solo es bueno, si no que en muchos sentidos es fruto de la mente de un genio del marketing y las finanzas (no voy a llegar a lo del ser superior ) y el único camino para mantenernos a la altura del brillo y el esplendor que conocimos con Bernabeu y que nos convirtió en lo que somos.
Me queda la duda de que en el terreno deportivo seamos capaces de encontrar el camino correcto que a estas alturas, ni yo mismo tengo claro como para ponerme a dar consejos.
Me debato entre la opción de no volver a repetir los errores que todos sabemos que cometimos en el pasado cambiando de entrenador año tras año con infaustos resultados, y la de que Florentino se decida de una vez por todas a entregarle la mejor plantilla del mundo al mejor entrenador del mundo, dándole plenos poderes y abriendo de una vez y de manera definitiva los ojos a la realidad futbolística del presente. Ejercicio este que nos ha costado mucho trabajo y muchos disgustos históricamente.
Perdón por el rollo.
+1000
