Ha marcado los mejores registros, ha marcado récords inalcanzables y
ha marcado goles decisivos. Con garra, carácter y trabajo ha conseguido
convertirse en el Señor de los Números, un cargo que le ha convertido en
el jugador más importante de la historia moderna madridista. Tras el
gol contra el Zaragoza, Raúl ha vuelto a demostrar lo que vale y lo que
puede aportar al Real Madrid. Le resta ésta y otra temporada más de
contrato, aunque ya tiene tomada una decisión: el capitán anunciará en
junio que, casi con toda seguridad, fichará por los New York Red Bulls.
Todo se acaba y parece que Raúl quiere buscar nuevas metas. Hace dos
meses, el siete blanco mantuvo una conversación con uno de los altos
cargos del equipo neoyorquino. Parece que de esa conversación Raúl salió
convencido por el reto que supone el cambio a la Major Soccer League.
Es un reto profesional al cambiar de equipo y de liga, pero también
personal por mudarse a un país con una cultura totalmente distinta a la
nuestra.
Los pocos minutos con los que ha contado durante esta temporada le
han servido para asumir una realidad basada en esa ley natural que es el
fútbol. Para los que hemos visto nacer a Raúl futbolísticamente nos
parece una pena que Raúl envejezca para el fútbol porque lo ha sido
todo. Sin embargo, él ha sopesado que otra temporada sin jugar todo lo
que él querría no le haría feliz. Por tanto, la opción estadounidense
sería la escogida.
Raúl es un mito del madridismo. Lo ha sido todo y lo es por un
trabajo con el primer equipo en quince años que le han elevado a los
altares del madridismo. El Bernabéu ha de despedirle como se merece
alguien de su talla por todo lo que ha conseguido con el siete a la
espalda. En junio, casi con toda seguridad, el Gran Capitán pondrá rumbo
a Nueva York dejando la puerta abierta del único club que, para él, ha
existido en su vida personal.
ha marcado goles decisivos. Con garra, carácter y trabajo ha conseguido
convertirse en el Señor de los Números, un cargo que le ha convertido en
el jugador más importante de la historia moderna madridista. Tras el
gol contra el Zaragoza, Raúl ha vuelto a demostrar lo que vale y lo que
puede aportar al Real Madrid. Le resta ésta y otra temporada más de
contrato, aunque ya tiene tomada una decisión: el capitán anunciará en
junio que, casi con toda seguridad, fichará por los New York Red Bulls.
Todo se acaba y parece que Raúl quiere buscar nuevas metas. Hace dos
meses, el siete blanco mantuvo una conversación con uno de los altos
cargos del equipo neoyorquino. Parece que de esa conversación Raúl salió
convencido por el reto que supone el cambio a la Major Soccer League.
Es un reto profesional al cambiar de equipo y de liga, pero también
personal por mudarse a un país con una cultura totalmente distinta a la
nuestra.
Los pocos minutos con los que ha contado durante esta temporada le
han servido para asumir una realidad basada en esa ley natural que es el
fútbol. Para los que hemos visto nacer a Raúl futbolísticamente nos
parece una pena que Raúl envejezca para el fútbol porque lo ha sido
todo. Sin embargo, él ha sopesado que otra temporada sin jugar todo lo
que él querría no le haría feliz. Por tanto, la opción estadounidense
sería la escogida.
Raúl es un mito del madridismo. Lo ha sido todo y lo es por un
trabajo con el primer equipo en quince años que le han elevado a los
altares del madridismo. El Bernabéu ha de despedirle como se merece
alguien de su talla por todo lo que ha conseguido con el siete a la
espalda. En junio, casi con toda seguridad, el Gran Capitán pondrá rumbo
a Nueva York dejando la puerta abierta del único club que, para él, ha
existido en su vida personal.