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El año pasado el equipo ya dio síntomas de un problema que afecta a la construcción del juego pero peor aún, a la disposición del once en el campo y su funcionamiento. Se trata de varios jugadores, que por sus características, chocan, abarcan espacios similares e incluso ocupan posiciones donde lejos de brillar, perjudican seriamente al equipo. Estoy hablando del binomio antinatural Di María - Cristiano Ronaldo.
Estos dos futbolistas, y ya se comentó varias veces la pasada campaña, NO pueden jugar juntos. Ambos son delanteros que se escoran a banda, abusan se la conducción, condicionando el juego y se desenvuelven mejor con espacios, sobre todo en el contragolpe, que sin ellos. Obviamente Ronaldo es mejor que el argentino pero éste último no puede evitar jugar como "sabe", es decir, conducir el balón y dárselas de Robben/Messi; como esto no es posible, porque la calidad no le llega y dudo mucho que la comprensión del juego sea su fuerte, intenta hacer la jugada del siglo en posiciones demasiado atrasadas donde es preciso un juego más colectivo, protegiendo la posesión del balón y siendo un poquito más inteligente a la hora de soltar un balón o no a tiempo.
El resultado de esto, es que el equipo SE PARTE y se demuestra una cosa en ello, por mucho que un jugador corra o le ponga voluntad, sacrificándose en defensa, de nada sirve a la postre si es incapaz de ejercer con un mínimo de criterio en una zona donde lo que prima es el balón. Es decir, de nada sirve correr en exceso, si luego de cada 4 balones 3 los pierdes.
Sin embargo, Mr. Perfecto, Special Finger, Líder de la secta, también conocido como Mourinho, lejos de resolver este problema, lejos de apuntalar el centro del campo, de darle más empaque o dotarle de mayor presencia ha optado para la más grande y mejor de las soluciones: empeorarlo. Contrata a un jugador polivalente-mediocre, que cualquier otro club habría fichado por 15 millones (siendo generoso) y lo ubica en el centro del campo junto a Xabi Alonso. Otro TROTÓN al que aplaudir por sus carreras olvidando los tremendos espacios que deja en la parte de atrás, así como la falta de compenetración futbolística como Alonso (el único jugador al que se le puede llamar medio en el Real Madrid)
Lo de ayer, tras unos 20 minutos de buena presión, fue un despropósito absoluto. Una vergüenza de juego como hacía tiempo no se veía. Hubo momentos, sobre todo en la segunda parte, en los que Xabi Alonso estaba SOLO en la medular, incluso haciendo faltas pasadas de vueltas ante las llegadas del Getafe a cada pérdida de balón del Real Madrid y aunque lo más "llamativo" fueron los fallos defensivos de Pepe y Carvalho, lo cierto es que el gran butronazo estaba en la media, donde el Madrid perdió la superioridad táctica y numérica una vez tras otra.
Visto lo visto, ya me sé el discurso, "Estamos a principio de temporada", "Lo importante eran los 3 puntos", "Mourinho es mi pastor, nada me falta", "Tú no eres madridista"...pero creo que cualquier aficionado, con dos dedos de frente, se da cuenta que jugando así no vamos a ninguna parte. Ya no es cuestión de tener un 80% de posesión o dar 50 toques de lado a lado hasta meter gol, lo preocupante es la falta de dominio durante fases muy largas, la pérdida de control de los partidos, la forma en la que se parte el equipo y cómo los jugadores acaban corriendo como pollos sin cabeza ante el caos generalizado.
Ronaldo y Di María no pueden jugar juntos, pero es que Ronaldo, Di María y Coentrão es pegarse un tiro en el pie.
Estos dos futbolistas, y ya se comentó varias veces la pasada campaña, NO pueden jugar juntos. Ambos son delanteros que se escoran a banda, abusan se la conducción, condicionando el juego y se desenvuelven mejor con espacios, sobre todo en el contragolpe, que sin ellos. Obviamente Ronaldo es mejor que el argentino pero éste último no puede evitar jugar como "sabe", es decir, conducir el balón y dárselas de Robben/Messi; como esto no es posible, porque la calidad no le llega y dudo mucho que la comprensión del juego sea su fuerte, intenta hacer la jugada del siglo en posiciones demasiado atrasadas donde es preciso un juego más colectivo, protegiendo la posesión del balón y siendo un poquito más inteligente a la hora de soltar un balón o no a tiempo.
El resultado de esto, es que el equipo SE PARTE y se demuestra una cosa en ello, por mucho que un jugador corra o le ponga voluntad, sacrificándose en defensa, de nada sirve a la postre si es incapaz de ejercer con un mínimo de criterio en una zona donde lo que prima es el balón. Es decir, de nada sirve correr en exceso, si luego de cada 4 balones 3 los pierdes.
Sin embargo, Mr. Perfecto, Special Finger, Líder de la secta, también conocido como Mourinho, lejos de resolver este problema, lejos de apuntalar el centro del campo, de darle más empaque o dotarle de mayor presencia ha optado para la más grande y mejor de las soluciones: empeorarlo. Contrata a un jugador polivalente-mediocre, que cualquier otro club habría fichado por 15 millones (siendo generoso) y lo ubica en el centro del campo junto a Xabi Alonso. Otro TROTÓN al que aplaudir por sus carreras olvidando los tremendos espacios que deja en la parte de atrás, así como la falta de compenetración futbolística como Alonso (el único jugador al que se le puede llamar medio en el Real Madrid)
Lo de ayer, tras unos 20 minutos de buena presión, fue un despropósito absoluto. Una vergüenza de juego como hacía tiempo no se veía. Hubo momentos, sobre todo en la segunda parte, en los que Xabi Alonso estaba SOLO en la medular, incluso haciendo faltas pasadas de vueltas ante las llegadas del Getafe a cada pérdida de balón del Real Madrid y aunque lo más "llamativo" fueron los fallos defensivos de Pepe y Carvalho, lo cierto es que el gran butronazo estaba en la media, donde el Madrid perdió la superioridad táctica y numérica una vez tras otra.
Visto lo visto, ya me sé el discurso, "Estamos a principio de temporada", "Lo importante eran los 3 puntos", "Mourinho es mi pastor, nada me falta", "Tú no eres madridista"...pero creo que cualquier aficionado, con dos dedos de frente, se da cuenta que jugando así no vamos a ninguna parte. Ya no es cuestión de tener un 80% de posesión o dar 50 toques de lado a lado hasta meter gol, lo preocupante es la falta de dominio durante fases muy largas, la pérdida de control de los partidos, la forma en la que se parte el equipo y cómo los jugadores acaban corriendo como pollos sin cabeza ante el caos generalizado.
Ronaldo y Di María no pueden jugar juntos, pero es que Ronaldo, Di María y Coentrão es pegarse un tiro en el pie.
